La Sociedad Italiana de Nutrición Humana (SINU) indica que es posible consumir 100 g. de quesos frescos y 50 g. de los curados, hasta un máximo de dos o tres veces por semana. El profesor Andrea Pezzana (director de dietética y nutrición clínica del hospital San Juan Bosco de Turín) declara al periódico Corriere.it que adolescentes y ancianos: “pueden consumirlo incluso tres veces, porque las proteínas y el conjunto fósforo-calcio-vitaminas que contiene actúan como un integrador natural”.
En 100 gramos de queso Gorgonzola DOP están presentes muchas proteínas, más precisamente 18 g. en el queso dulce y 21 g. en el tipo picante. ¿Por qué las proteínas son tan importantes? Seguramente porque son una forma de energía irrenunciable para el organismo, y también porque están involucradas en la producción y en el turnover de los tejidos celulares, y contribuyen a mantener una buena masa muscular.
¡Y eso no es todo! Una característica propia del queso Gorgonzola DOP es que las proteínas que contiene son altamente digeribles. De hecho, gracias a la actividad microbiana intensa durante el curado éstas se escinden en moléculas proteicas más pequeñas y, por lo tanto, más digeribles.
Incluso para los que siguen un régimen vegetariano, la Doctora Mónica Giroli (nutricionista en el centro Cardiológico Monzino IRCCS de Milán), afirma que el queso Gorgonzola DOP, junto a todos los quesos, a la leche y al yogur, es una alternativa válida a la carne por la cantidad de proteínas de calidad que contiene.