Durante la producción y el curado del queso ocurre una degradación importante de las proteínas de la leche, por parte de los microorganismos característicos del queso Gorgonzola. El curado del queso induce una demolición significativa de las proteínas de la leche y la formación de una gama rica de péptidos pequeños y aminoácidos libres, que se ponen fácilmente disponibles y asimilables.
Estos compuestos, además de los compuestos de valor nutricional elevado que caracterizan la leche, convierten el queso Gorgonzola en un alimento seguramente apto para la dieta de los deportistas.